Normalmente no grabo prácticas de lo que estudio pero está vez lo necesitaba. Se trata de un preludio que ya comencé a estudiar hace años, esta es la segunda vez que lo retomo y, como no tenía más tiempo para seguir puliéndolo, he preferido grabarlo tal como está. Hay algunos fallos pero el conjunto sale, se llega hasta el final, algún más adelante ya lo estudiaré de nuevo.
Es un preludio muy rico en dinámicas, que comienza con una melodía dulce. Esta reaparece en octavas e inesperadamente se trunca para dar paso a unos momentos felices casi de ensoñación. Acabada esta parte, vuelve el motivo original pero ahora con transposiciones que aumentan la tensión hasta alcanzar el clímax y una cadencia final extendida por la coda. El último acorde es con una tercera mayor, la tercera picarda que lo convierte en un acorde mayor.
La imagen es de la catedral de Rio de Janeiro. De este compositor escribí una reseña bibliográfica